‘La
vie d’Adèle’ es un drama lésbico que rehúye de transgresiones banales y
conflictos redundantes gracias, en parte, al uso inteligente con que las elipsis
narrativas son empleadas. La estructura narrativa en dos capítulos obedece a los designios dramáticos de la trama. El primer capítulo trata del descubrimiento del amor y del
autodescubrimiento personal, mientras que el segundo muestra que la vida es un
continuo proceso de pérdida (la pasión se diluye y el amor se marchita) y que
el vacío que deja el ser amado resulta, a veces, irremplazable.